El gobierno de Joe Biden anunciará esta semana sus planes para levantar una orden de emergencia por salud pública, conocida como Título 42, que permite la expulsión de migrantes en la frontera. El cambio entraría en vigor en mayo, según un reporte de The New York Times.
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Título 42, implementada en el gobierno de Donald Trump, permite la expulsión de inmigrantes sin necesidad de un juicio sumario.
La decisión, que no es definitiva todavía, acabaría el uso de razones de salud pública para absolver a Estados Unidos de sus obligaciones, bajo las leyes nacionales y tratados internacionales, de otorgar asilo a víctimas de persecución. la modificación permitiría pedir asilo a los inmigrantes que ingresan al país sin ser rechazados debido a preocupaciones de la pandemia.
De acuerdo al NYT, las autoridades creen que al levantar la orden, más migrantes de Centroamérica y otras regiones intentarán llegar hasta la frontera. Levantar las limitaciones para mayo le daría a los agentes fronterizos tiempo para prepararse, indicaron los funcionarios. Sin embargo, la demora sigue siendo inaceptable para algunos demócratas y activistas, quienes denuncian que Estados Unidos está usando la pandemia como excusa para eludir sus obligaciones en el tema de asilo.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades es la entidad que debe levantar esta orden, que ha sido criticada por políticos demócratas y activistas por igual. A fines de enero, los CDC prorrogaron otros dos meses la decisión de bloquear los asilos. La decisión tendría que ser renovada esta semana, pero el gobierno no ha tomado una decisión definitiva y se espera un anuncio en los próximos días.
Los senadores John Cornyn y Ted Cruz, junto con la mayoría de los legisladores republicanos texanos en el Congreso, firmaron una carta esta semana, urgiendo a la administración de Biden para que continúe aplicando la regla de Título 42.
Incluso los representantes Vicente González de McAllen y Henry Cuéllar de Laredo, ambos demócratas, firmaron la carta en la que explican que el Departamento de Seguridad Nacional no tiene los recursos ni la capacidad para procesar a todos los inmigrantes arrestados en la frontera sur.
John Cornyn, ha estado liderando esfuerzos para mantener en vigencia la orden. “Le ha dado a la Patrulla Fronteriza la autoridad de expulsar a ciertos grupos de migrantes, sobre todo hombres adultos, sin necesidad de que tome un largo y complejo proceso”, dijo Cornyn por medio de un comunicado.
“Obviamente, gente que viene de todo el mundo, cruza nuestra frontera, en muchas instancias de cientos de diferente países, muchos de ellos, quizás la mayoría de ellos, ni siquiera están vacunadas. No se les ha hecho pruebas de covid-19″, dijo Cornyn sin aportar con cifras que corroboren su afirmación.
Cornyn dijo que la Patrulla Fronteriza no quiere que expire la medida sin un plan para controlar un mayor volumen de migrantes. “Van a simplemente perder el control de la frontera”.
Expertos de salud pública han dicho que no hay una base científica para para mantener la orden y que estos no representan un riesgo de transmisión, sobre todo en este momento de la pandemia.
*Con información de The Associated Press y de The Dallas Morning News