La tecnología puede ayudar a mejorar nuestra día a día. Se pueden construir casas en 3D, material médico especializado o incluso ropa más sostenible gracias a distintos avances. El campus de verano Xnergic, proyecto de sensibilización y fomento de las vocaciones tecnológicas impulsado por el TecnoCampus, es una tradición y este año no faltará a la cita. Se dirige a chicos y chicas de 12 a 18 años, a quienes acerca la tecnología de una manera amena.
Este año se celebra entre el 29 de junio y el 24 de julio. Es una actividad para aprender no solo a través de libros o apuntes, sino también a partir de experiencias y vivencias.
En esta edición, la programación incluye todo tipo de talleres: construcción de un juego de plataformas con Unity3D, manchados de tinta (donde se trabaja con tintes inteligentes), diseño de ropa 3D con Marvelous Designer, creación de un mundo de fantasía con Unreal Engine, curso de diseño para Minecraft, construcción de un videojuego FPS en Unity3D, modelado y escultura digital con Maya…
“Este año hemos querido darle la vuelta. Estamos implicados en un proyecto sobre la renovación del textil. Lo que hacemos es planificar actividades en el campus para hablar de tecnología y textil (además de ofrecer otros talleres)”, apunta Marco Antonio Rodríguez, profesor del Grado en Medios Audiovisuales y del Grado en Diseño y Producción de Videojuegos del TecnoCampus, y organizador de Xnergic.
Ropa inteligente
Hay planeados distintos talleres textiles dentro del marco del proyecto ReimagineTextile donde participa también Eurecat. “Se realizará un taller de telas para teñir tejidos con tintas termocrómicas y fotocrómicas. Eso permite que el color cambie en función de la temperatura y que emitan luz. Los estudiantes lo harán a partir de estudiar el proceso químico y físico de los componentes que se utilizan”, señala Rodríguez.
Los participantes podrán experimentar con la luz, obtener pigmentos naturales, estudiar las transformaciones energéticas, crear pinturas que reaccionan con la luz y temperatura e idearán un proyecto.
También hay un taller de una alumna de cuarto del Grado en Diseño y Producción de Videojuegos ya que los propios estudiantes de TecnoCampus se implican mucho en esta actividad y ayudan a organizarla. “Es un taller de ropa virtual. Es muy divertido porque se diseña ropa sobre un personaje 3D como si fuera un videojuego. Al acabar se puede hacer un desfile virtual o se pueden generan los patrones que son necesarios en el mundo real para crear la ropa”, sentencia el profesor.
“De cara a Xnergic de Navidad, habrá un taller de diseño de complementos en 3D para ropa y de electrónica wearable para incluir sensores en las piezas de ropa”, añade.
Aprendizaje Basado en Proyectos
Uno de los aspectos más interesantes de Xnergic es que los conceptos se aprenden a través de proyectos y de aplicar todos los conceptos de una forma muy práctica. El Aprendizaje Basado en Proyectos es una metodología didáctica en la que el alumno aprende los conceptos mediante la realización de un proyecto o resolución de un problema.
En el caso de Xnergetic, los participantes aprenden distintas competencias: diseño, programación y hardware, pero también emprendimiento y habilidades transversales como la comunicación, el trabajo en equipo o diseño de proyectos. Además, los jóvenes pueden conocer un poco más sobre ámbitos que les pueden generar dudas o curiosidad antes de elegir su futuro académico.
La tecnología está presente en muchos ámbitos, pero todas las competencias pueden ser necesarias y ayudar a los alumnos en su futuro académico, profesional y también personal. “Es importante destacar que la tecnología es transversal. No solamente los ingenieros la usan, sino que está presente en muchas profesiones”.
Fomentar las vocaciones tecnológicas entre las chicas
En el ámbito universitario la paridad sigue sin llegar a muchos grados. Según los datos de la Estadística de Indicadores Universitarios 2018 del Ministerio de Educación, en Informática, los hombres representan el 87,9% del total del alumnado, mientras que en Educación domina la presencia femenina con un 77.5%.
Desde TecnoCampus, intentan dar a conocer la ciencia y la tecnología, también entre las chicas, que suelen matricularse menos en grados como las ingenierías. En este sentido, organizan distintas actividades y programas, como TecnoGirl, que intenta fomentar las vocaciones tecnológicas entre chicas de entre 12 y 18 años.
“La falta de vocación tecnológica de chicas viene de que no ven la finalidad. Hay estudios que apuntan que a las chicas les atrae la finalidad y el resultado, si alguna cosa sirve para ayudar a los demás, para aportar a la sociedad. Pero el aprendizaje tecnológico también puede aportar mucho a nivel social”, concluye Rodríguez.