NUEVA YORK (AP) — El 2021 fue el año con más muertes en la historia de Estados Unidos.
¿La causa principal? El COVID-19, dice Robert Anderson, quien supervisa el trabajo de los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades (CDC) sobre estadísticas de muertes
La agencia actualizó este mes su conteo provisional de muertes. Muestra que hubo más de 3,46 millones de decesos el año pasado, unos 80.000 más que el récord anterior registrado en el 2020.
A inicios del año anterior, los expertos vaticinaban con optimismo que el 2021 no sería tan malo como el primer año de la pandemia, en parte por la disponibilidad de las vacunas contra el COVID-19.
“Nos equivocamos, desafortunadamente”, manifestó Noreen Goldman, investigadora de la Universidad de Princeton.
Las muertes por COVID-19 aumentaron en el 2021 —a más de 415.000, comparadas con unas 351.000 el año previo— en momentos en que surgían nuevas variantes del virus y una cantidad inesperada de estadounidenses se negaba a vacunarse o a usar la mascarilla.
El coronavirus no es el único culpable. También aumentaron las muertes por cáncer, diabetes, enfermedades hepáticas e infartos, según los CDC.
De igual manera subieron las muertes por sobredosis de drogas. Los CDC todavía no tienen un conteo definitivo de muertes por sobredosis para 2021 porque las investigaciones y pruebas de laboratorios tardan semanas. Pero según datos provisionales que llegan hasta octubre, el país está encaminado a registrar por lo menos 105.000 decesos por sobredosis en el 2021, comparados con 93.000 el año anterior.
Nuevos resultados difundidos el martes muestran un aumento pronunciado de fallecimientos por sobredosis en jóvenes de entre 14 y 18 años.
Las muertes por sobredosis entre adolescentes se habían mantenido más o menos constantes en la década pasada, situándose en unas 500 al año, según el estudio publicado por el Journal of the American Medical Association. Pero en el 2020 ascendieron a 954 y los expertos calcularon que llegaron a casi 1.150 el año pasado.
Joseph Friedman, un investigador de la UCLA que fue el principal autor del estudio, dijo que el alza no tiene precedentes.
Las muertes de adolescentes por sobredosis fueron apenas 1% del total en Estados Unidos. Pero los adolescentes experimentaron un aumento relativo mayor que la población en general, pese a que sondeos indican que el consumo de drogas entre ellos ha bajado.
Los expertos atribuyen el alza al fentanilo, una droga sumamente letal que ha sido mezclada con heroína durante años. Más recientemente ha estado presente también en píldoras falsas similares a las drogas por prescripción usadas a veces por adolescentes.
El número total de muertes en Estados Unidos a menudo sube de año en año con el crecimiento poblacional. Pero el 2020 y el 2021 registraron incrementos extraordinarios en los números y las tasas de muertes, debido sobre todo a la pandemia.
Esas tendencias nacionales afectan la esperanza de vida (un estimado del número promedio de años que un bebé nacido en un año dado podría vivir).
Con excepciones raras, la esperanza de vida en Estados Unidos ha subido ligeramente cada año. Pero el estimado de los CDC de esperanza de vida para el 2020 fue de unos 77 años, más de un año y medio menos de lo que fue en el 2019.
Los CDC no han reportado aún sus cálculos para el 2021. Pero Goldman y otros investigadores han estado haciendo sus propios estimados, presentados en estudios aún no publicados en revistas revisadas por pares.
Esos estudiosos dicen que la esperanza de vida cayó otros cinco o seis meses en el 2021, lo que la coloca donde estaba hace 20 años.
Una pérdida de más de dos años en esperanza de vida en los últimos dos años es enorme, dijo Goldman.
Un estudio examinó los datos de muertes en Estados Unidos y otros 19 países de altos ingresos. Estados Unidos fue el peor.
“Lo ocurrido en Estados Unidos se debe menos a las variantes que a los niveles de resistencia a la vacunación y de rechazo entre el público a prácticas como el uso de mascarillas y los mandatos para reducir la transmisión viral”, dijo uno de los autores del estudio, el doctor Steven Woolf, de la Virginia Commonwealth, en una declaración.
Algunos expertos expresan escepticismo de que la esperanza de vida vaya a recuperarse pronto. Temen las complicaciones a largo plazo por el COVID-19 que pudieran acelerar las muertes de personas con problemas de salud crónicos.
Datos preliminares — e incompletos — de los CDC indican que hubo al menos 805.000 muertes en Estados Unidos en los primeros tres meses de este año. Eso es mucho menos que en el mismo período el año pasado, pero más elevado que en el período comparable de 2020.
“Pudiéramos terminar con una ‘nueva normalidad’ que es un poco más elevada que lo que era antes”, dijo Anderson.
The Associated Press recibe apoyo para sus coberturas de salud y ciencia de parte del Departamento de Educación Científica del Instituto Médico Howard Hughes. La AP es la única responsable del contenido.