LOS ÁNGELES — La actual generación de la selección de Estados Unidos es considerada por muchos la mejor de su historia, un grupo de jugadores jóvenes con mucho talento cuyo mayor éxito es mantenerse como la segunda selección en la eliminatoria, por encima de México, a la que venció en tres partidos consecutivos el año pasado.
Al tener como referencia a México como el gran rival en su zona geográfica, las comparaciones son constantes y algunas maneras de medir sus alcances son los duelos directos, en los que Estados Unidos logró una racha de tres victorias consecutivas en 2021, o el número de seleccionados que militan en clubes de buen nivel en Europa.
Estados Unidos encara la última fecha FIFA de eliminatorias mundialistas de CONCACAF en busca de asegurar el boleto a la Copa del Mundo a disputarse en Catar a finales de este año. En los últimos tres partidos se medirá a México, Panamá y Costa Rica.
De los 26 jugadores en la actual lista de convocados del técnico Gregg Berhalter, 16 juegan en el Viejo Continente. Eso sin contar que hay ausencias debido a lesión de jugadores que militan en Europa como Weston McKinnie, Sergino Dest y Brenden Aaronson. Hay, además, otro buen número de elementos ya en Europa, que están peleando por un futuro llamado esperando su oportunidad.
Es el mayor número de jugadores en Europa de dónde echar mano para la selección estadounidense y eso representa un salto de calidad.
“Todos los jugadores en la selección ahorita son jóvenes, con mucho potencial y jugando en las grandes ligas. Para mí es muy importante que estén jugando en otros países, que no tengan el mismo roce en la liga nacional y esa es la diferencia entre México y USA hoy en día. Los jugadores que están de titulares están jugando en Europa y tiene un roce muy diferente”, dijo el ex seleccionado estadounidense, Michael Orozco, en entrevista con ESPN.
En la más reciente ventana de transferencias en el mercado de invierno, la liga local norteamericana, MLS, tuvo un número récord de transferencias al extranjero con 16. Estos números aumentan año con año con la exportación de talento joven, lo cual inevitablemente está teniendo un impacto en la selección estadounidense.
Este jueves se vivirá una nueva rivalidad entre las selecciones de México y Estados Unidos. En el año 2021, las barras y las estrellas se impusieron a México en los tres enfrentamientos directos importantes que sostuvieron, llevándose el título de Nations League, Copa Oro y los tres puntos en el pasado duelo eliminatorio.
“Siempre es emocionante la rivalidad entre Estados Unidos y México, la rivalidad siempre estará ahí, es increíble que veamos a ambos empujándose al siguiente nivel. Después de los resultados del año pasado con Estados Unidos ganando tres de los partidos importantes, creo que pondrá presión en la Selección Mexicana. Este partido en particular será especial, habrá fuegos artificiales en el terreno de juego”, compartió el ex seleccionado, Cobi Jones en entrevista.
El eterno mote del Gigante de CONCACAF que por años pertenecía a México, hoy en día genera polémica como nunca antes, pues las distancias se han acortado en cuanto al nivel de selecciones de la zona.
“La meta de cualquier equipo es ser el mejor de cualquier región. Por décadas, México tuvo ese lugar. En los últimos años, Estados Unidos ha seguido subiendo y peleando por ese puesto. El resultado de ese ida y vuelta ha hecho a cada equipo mejore y en su parte, a todos los equipos de la CONCACAF”, agregó Jones.
Actualmente, no podemos dejar de lado a la selección de Canadá. El conjunto de la Hoja de Maple cuenta con su propia generación dorada que los tiene como líderes del Octagonal y ya con un pie en Catar.
“Al momento es Canadá, están jugando muy bien, han calificado y tienen buen equipo. Nosotros dos tenemos mucho trabajo para llegar a ese nivel otra vez”, señaló uno de los jugadores históricos de USA, Landon Donovan, en entrevista con ESPN.
La primera gran asignatura para la generación más joven de la historia de Estados Unidos en unas eliminatorias mundialistas es asegurar el boleto a la Copa del Mundo; sobre todo luego de que la anterior camada se perdió la pasada justa mundialista.
En la presente convocatoria, trece jugadores tienen la edad de 24 años o menos. Erik Palmer-Brown y Antonee Robinson con 24, Tyler Adams, Reggie Cannon y Christian Pulisic, 23; Tim Weah, 22; Jesus Ferreira y James Sands, 21; Gianluca Busio, Yunus Musah, Ricardo Pepi y Gio Reyna con 19. Esto solamente nos indica que el techo es amplio para este grupo y el futuro luce repleto de posibilidades.
Aún queda mucho camino por recorrer y esta generación podrá ser calificada por sus logros internacionales y qué tanto puedan trascender, ya sea en Catar o en la Copa del Mundo 2026 como locales.
Por lo pronto, los aficionados estadounidenses no olvidan lo conseguido por la generación del 2002, en aquel triunfo sobre México en la Copa del Mundo Corea-Japón para avanzar a cuartos de final. El máximo resultado en un mundial para México ha sido llegar a la instancia de cuartos de final; lo hizo como anfitrión en 1970 y 1986, mientras que USA, consiguió un tercer lugar en la primera justa mundialista de la historia en 1930, además de llegar a cuartos de final a costas de México en 2002.
“Siempre te acuerdas de la última vez importante en que te enfrentaste. Todos recuerdan el enfrentamiento de la Copa del Mundo en 2002 en los octavos de final que Estados Unidos los venció 2-0, es la última vez que nos enfrentamos en un mundial y todos los recuerdan. Desde la perspectiva de Estados Unidos sería increíble obtener un resultado en México”, recordó Steve Cherundolo, quien defendió la playera de Estados unidos en tres Copas del Mundo, 2002, 2006 y 2010.
Lo cierto es que el proyecto de Estados Unidos con su ‘Capitán América” en Christian Pulisic a la cabeza, sueña con un Campeonato del Mundo que los consagre como la mejor generación estadounidense de todos los tiempos y los meta en la conversación de las grandes selecciones a futuro.