“Ahorita estoy muy orgulloso de que esto es una posibilidad, que puede ser…”
Así describe Ángel Salazar lo que sintió al enterarse de que partes de la reforma migratoria han sido incluidas en el proyecto de ley de infraestructura de tres billones y medio de dólares presentado por los demócratas del Senado.
“Así podemos sentirnos mas seguros en este pais y no me tengo que preocupar de que me van a deportar”, dijo Salazar.
La propuesta que abriría un posible camino hacia la ciudadanía para muchos inmigrantes se ha incluido en uno de los proyectos de infraestructura y que podría ser aprobado solo con el voto de los demócratas bajo el procedimiento llamado “reconciliación”.
Es una fórmula compleja con la que los demócratas, que controlan el Senado, la Cámara de Representantes y la Casa Blanca, intentan apobar ciertas legislaciones progresistas en temas como inmigración o cambio climático, sin depender de los republicanos en el senado (para aprobar la mayoría de proyectos de ley se necesitan 60 senadores, es decir al menos 10 republicanos).
De aprobarse el proyecto acabaria con años de incertidumbre para los jóvenes soñadores beneficiarios de DACA y otros como los beneficiarios del TPS y posiblemente trabajadores del campo o incluso “trabajadores esenciales”.
“Sabemos que fue una promesa de la campaña de la administración Biden y no vamos a dejar que se olvide de esta prioridad y que hay que ver resultados los mas pronto possible”, dijo Alana Cantillo, del NYIC.
Desde los intentos de la administración Trump para acabar con el programa DACA, los denominados soñadores, aquellos que llegaron al país sin papeles cuando eran niños, han vivido en el limbo. Muchos de ellos han sido trabajadores esenciales en esta crisis.
“Si los inmigrantes tienen más apoyo y más protecciones va a ver un impacto muy significado en la economía de nosotros”, agregó Cantillo.
Bajo DACA, Ángel ha podido trabajar y pagar sus estudios en el país donde se crió desde que tenia 2 años. Con un estatus permanente, le daría la oportunidad de abrir su propio negocio y comprar su primera casa sin tener miedo a ser deportado a país que no conoce.
“Si me deportan a México, no voy a saber nada de ese país, no voy a conocer a nadie, porque aqui esta mi familia y mis amigos”, dijo Ángel.
Organizaciones de defensa de los derechos de los inmigrantes como el NY Immigration Coalition dicen que organizarán manifestaciones este mes para que esta legislación se haga realidad.