Primera modificación:
En medio de una ola de calor y temperaturas récord en el oeste de Estados Unidos, el incendio forestal que recibe el nombre de ‘Bootleg’ superó el martes las 80.000 hectáreas calcinadas en el sureste de Oregón. Los bomberos de la región ya han advertido que no prevén tenerlo completamente controlado hasta finales de otoño.
Este miércoles 14 de julio ‘Bootleg’ arde por octavo día consecutivo. La conflagración, la mayor en todo el país, ha calcinado al menos 80.000 hectáreas de una zona montañosa y de vegetación del Bosque Nacional de Fremont-Winema, situada entre los estados de Oregón y California.
A pesar de llevar activo más de una semana, las llamas se intensificaron el sábado por la tarde y obligaron a los bomberos y a los equipos de rescate a abandonar la zona por el “alto riesgo que amenazaba la vida”, según alertó el propio cuerpo de bomberos.
“Al salir allí hoy, ajustas tu realidad. No hemos visto un fuego moverse así, en estas condiciones, en esta época del año. Debemos esperar que haga cosas que nunca hemos visto antes”, dijo Al Lawson, comandante de los bomberos desplegados en la emergencia.
Los bomberos ya han advertido que lo más probable es que no puedan contener las llamas por completo en la zona hasta noviembre de este año, y es que, en la última actualización del estado del incendio, las fuerzas de rescate señalaron que tan solo el 15 % de las llamas están controladas.
The 7/13/2021 daily update for the Jack Fire ⬇️ Acreage is estimated at 13,795 and is 15% contained. OSFM’s Task Forces have demobilized and delegation of authority transferred back to Douglas Fire Protective Association. pic.twitter.com/zJ59V3MQhB
— Oregon OSFM (@OSFM) July 13, 2021
El peligro que supone ‘Bootleg’ ha hecho que las autoridades pidan a la población que esté lista para evacuar si es necesario. A pesar de las miles de hectáreas cerradas para evitar la propagación del fuego, hasta este martes este ha afectado a 2.000 viviendas y ha destruido al menos 20.
La tarea de extinción está siendo complicada por el clima caluroso, seco y ventoso. No obstante, los bomberos han conseguido mantener las llamas a raya y fuera de varias comunidades pequeñas de la zona. En algunos puntos de la región se pueden ver carteles con mensajes como “gracias a los bomberos y a los primeros en responder”.
“La rápida actuación de los equipos sobre el terreno impidió que numerosas viviendas se incendiaran durante la lluvia de brasas nocturnas”, indicó el lunes un comunicado del Servicio Forestal de Estados Unidos.
El incendio está complicando la vida de los locales a varios niveles. La proximidad del ‘Bootleg’ a una línea de transmisión eléctrica de alto voltaje que conecta las redes de California y Oregón, ha hecho que las autoridades pidan a sus consumidores que reduzcan al máximo el consumo eléctrico para evitar que esta se sobrecargue. El lunes se registraron apagones que la compañía eléctrica local asegura ya están bajo control.
Unas condiciones climáticas perfectas para la propagación de incendios
Terrenos especialmente secos tras una temporada de lluvias escasa hacen más propicia la propagación de las llamas. A eso hay que sumarle unas temperaturas récord en muchos puntos del país debido a la ola de calor que recorre Estados Unidos y Canadá.
“Desde el 1 de junio, hemos visto al menos 67 estaciones (meteorológicas) con largos períodos de informes que se remontan a hace 75 años y que han empatado o roto récords de calor de todos los tiempos. Muchos de ellos ocurrieron con la excepcional ola de calor del noroeste del Pacífico de finales de junio”, apuntó a través de redes sociales el Centro de Predicción Meteorológica.
Since June 1st, we’ve seen at least 67 stations with lengthy reporting periods stretching back at least 75 years that have tied or broken all-time heat records. Many of those occurred with the exceptional Pacific Northwest heat wave in late June. pic.twitter.com/ZjrVprOyeb
— NWS Weather Prediction Center (@NWSWPC) July 12, 2021
Según los expertos, el cambio climático ha hecho que el oeste del país sea mucho más cálido y seco, una situación que, advierten, empeorará. Resaltan que estas condiciones extremas son una combinación de patrones meteorológicos naturales a corto plazo, agravados a largo plazo por el cambio climático, causado principalmente por la acción humana.
Si bien se estima que las temperaturas extremas se debiliten, eso no evitará, por el momento, que los termómetros estén por encima de lo normal, algo que ya ha contribuido a la proliferación más de 60 incendios activos en todo el país.
Más de 4.100 incendios solo en California en lo que va de año
En California, otro incendio ya ha quemado más de 37.600 hectáreas y tiene a más de 3.000 bomberos luchando por extinguirlo. Este está localizado en las inmediaciones del Bosque Nacional Plumas, en el extremo norte de Sierra Nevada, a unos 80 kilómetros al noroeste del lago Tahoe. Se prevé que esté controlado para finales de mes.
En la zona también se han emitido órdenes de evacuación por el peligro que suponen para la vida humana las llamas a unos 3.000 residentes, según la información proporcionada por medios de comunicación locales.
Las llamas también han llegado al simbólico Parque Nacional Yosemite, con 3.800 hectáreas arrasadas, al menos el 15 % del fuego ya ha sido contenido y se espera que los índices de extinción mejoren en los próximos días.
Esta zona del estado de California está registrando temperaturas de más de 42 grados centígrados, un factor que ayuda a la propagación del incendio y que hace muy complejo el trabajo de los equipos forestales.
El problema de los grandes incendios ha convertido en una constante. Según cifras de la organización Cal Fire, en lo que va de 2021 se han registrado más de 4.100 incendios solo en California, y los meses más favorables para la proliferación del fuego, octubre y noviembre, ni siquiera han llegado.
Con EFE, AP y medios locales